Deserción
escolar aumentó, El Periódico
Autora:
Ana Lucía Gómez (2020)
En
2019, un total de 211 mil 22 estudiantes de los cinco niveles educativos
(preprimaria, primaria, básico, diversificado y primaria de adultos) abandonaron
los estudios, dentro de un total de alumnos inscritos de 4 millones 178 mil 719
estudiantes; de acuerdo con cifras preliminares (al 16 de diciembre de 2019),
de la Dirección de Planificación del Ministerio de Educación.
Lamentablemente
la deserción escolar en Guatemala ha ido aumentando de en estos dos últimos
años. En las estadísticas de las imágenes se puede observar que los niveles de
básicos y diversificado son los que tienen mayor porcentaje de alumnos
retirados. En general, en los cinco niveles educativos la tasa de deserción se
redujo levemente el año pasado. En 2018 fue de 5.34 por ciento, mientras que en
2019 fue de 5.05. En los niveles de preprimaria y primaria la tasa se redujo de
4.83 a 3.70 por ciento y de 4.68 a 4.24 por ciento, respectivamente.
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Coronavirus:
La deserción escolar es una amenaza pospandemia, Prensa Libre
Cuando
el ciclo escolar se normalice y los estudiantes vuelvan a las aulas, existe el
riesgo de que muchos escritorios queden vacíos, las razones son varias, pero la
crisis económica que atraviesan las familias tiene mayor peso. La tasa de
deserción escolar podría elevarse este año. El alcance de la pandemia del
covid-19 va más allá de la salud, la educación también se ve impactada por la
aparición del virus. Los centros educativos debieron cerrar y los niños y
adolescentes confinarse en sus casas para protegerse. Van más de 70 días sin
clases presenciales y mientras más tiempo transcurra alejados de las aulas
crece el riesgo de que el sistema educativo no pueda retenerlos, cuando el
ciclo se normalice.
Datos
del Ministerio de Educación indican que en el 2019 la tasa de deserción escolar
alcanzó un 7%, este año la cifra podría incrementarse, con un efecto crítico en
las áreas rurales, donde el abandono de los estudios ya es evidente.
En
un sistema educativo que ha dejado afuera a miles de jóvenes, excluye a las
mujeres, relega a las personas con discapacidad y a la población indígena y a
quienes están lejos de las urbes, la deserción viene a mermar cualquier
esfuerzo por aumentar la cobertura escolar. Entre las razones que pueden
empujan a la deserción escolar, está el impacto socioeconómico que tienen los
hogares como producto de la pandemia, lo que podría dificultar que los padres
apoyen la continuidad de los estudios de sus hijos, debido a que esto implica
un gasto. En Totonicapán, por ejemplo, en la mayoría de las aldeas las familias
se dedican al comercio informal, pero desde que comenzó el confinamiento el
negocio mermó, así que los adultos se han visto obligados a movilizarse a otras
comunidades para conseguir algo de dinero, pero en esta labor se suman los
niños y los adolescentes, para quienes hacer las tareas que les asigna a la
distancia en la escuela pasa a segundo plano. Trabajar en la agricultura es
otra de las actividades a las que han tenido que ocuparse para ayudar en el
hogar.
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Creciente
migración obliga a los niños a abandonar las aulas, Prensa Libre
Autora:
Ana Lucia Ola (2019)
La
deserción escolar es un tema que el sistema educativo no ha logrado superar.
Cada año se reporta un buen número de niños que abandonan las aulas y las
causas son diversas, trabajo infantil y factores económicos han sido las
principales, pero desde hace varios años un nuevo factor se ha añadido: la
migración. Ya sea el movimiento interno o hacia otros países,
principalmente hacia Estados Unidos, los menores se están alejando de los
salones de clases para emprender un peligroso viaje en busca de mejores
condiciones de vida.
En
los últimos tres años, en los registros del Ministerio de Educación (Mineduc)
se observa un descenso en la cantidad de menores que se dejaron la escuela, en
paralelo también se ve una baja en la cobertura, y cada vez son más los niños y
adolescentes que quedan fuera del sistema educativo -más de 1.6 millones-, por
lo que resulta lógico el reporte de una disminución en la deserción.
Sin
embargo, durante el 2018 los datos del abandono escolar incrementaron en un 42%
comparado con el período anterior. De 152 mil 820 la cifra saltó a 217 mil 739.
La explicación por parte de la cartera es que los recientes datos de abandono
escolar son preliminares, y que el aumento se debe a que el año pasado se
implementó un sistema que automáticamente inscribía a los niños. Muchos
aparecen como inscritos, pero no llegaron a las aulas.
El
año pasado la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) reportó que
un total de 4 mil 821 menores no acompañados retornaron a Guatemala luego de
intentar viajar de manera ilegal hacia Estados Unidos en busca de mejorar sus
condiciones de vida. La migración se convierte en un factor que repercute
en la deserción escolar, pues los menores dejan la escuela para emprender ese
viaje, si logran llegar a su destino ya no vuelven a su escuela, pero si no corren
con esa suerte, es probable que tampoco lo hagan, y la mayoría vuelve a
intentar cruzar la frontera.
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Miles de niños abandonan la escuela
Autores: Yanira Alvizures y
Corresponsables (2017)
En lo que va del año, 13 mil
menores de edad abandonaron sus estudios por diferentes causas, entre ellas
trabajo, especialmente en la provincia, según cifras oficiales. Por
Yanira Alvizurez Y Corresponsales.
Diego
Fernando Castro Martínez, de 13 años, siempre soñó con graduarse de
médico para ayudar a su familia y contribuir con el desarrollo de su comunidad,
pero hace unos meses su padre le dijo que tenía que abandonar su anhelo y dejar
la escuela para buscar trabajo, a fin de que pudiera apoyar en la economía
familiar. Diego es uno de los 13 mil menores de edad que en los primeros cuatro
meses del año suspendieron sus estudios, en especial en primaria y
básicos, por pobreza, desintegración familiar, patrones culturales,
migración, trabajo infantil, condiciones de salud, infraestructura escolar o
racismo. Esos niños viven, en su mayoría, en Guatemala, Escuintla,
Petén, Izabal, Suchitepéquez, Zacapa y Chiquimula.En
Escuintla, la causa de deserción escolar en muchas adolescentes es el embarazo
precoz. En el 2016 se registraron 65 casos.
“Me
duele mucho haber dejado la escuela porque me doy cuenta de que muchos
niños desaprovechan la oportunidad que les dan sus padres de cumplir su sueño y
yo, en cambio, debo trabajar”, lamenta el menor, quien cursaba sexto primaria
en la escuela de El Progreso, Mazatenango, Suchitepéquez.
Miriam
Maribel Glinz Palencia, directora Departamental de Educación en Escuintla,
explicó que la mayoría de niñas que desertaron fueron víctimas de
violación. Comentó que preocupa no solo que no hayan terminado el ciclo
escolar, sino que no se inscribieron en el actual.
“Decidí
abandonar mis estudios porque resulté embarazada y me daba vergüenza que mis
compañeros se burlaran de mi condición. No denuncié al violador por temor a que
tomara represalias contra mi familia”, expresó una de las adolescentes, de 14
años.
Glinz
Palencia indicó que ningún establecimiento educativo privado o del Estado
debe negar el acceso a una niña embarazada, pero la decisión de
seguir con sus estudios es de estas y sus familiares. En los primeros
cuatro meses del presente ciclo escolar, 737 estudiantes de todos los niveles
abandonaron los estudios en ese departamento.
La deserción escolar aumento en el país ya que por causas extremas como lo es la pandemia muchos de los niños que viven en lugares lejanos a una escuela, no pueden recibir clases por falta de recursos como lo son una computadora e internet. La falta de empleo para los padres de familia hicieron que los niños de ciertos lugares tuvieran que dejar sus estudios pausados para que pudieran buscar un empleo y ayudar en casa ya que no es suficiente el pago que tienen los padres de familia y prefieren optar por comprar alimentos para tener día a día y más adelante poder inscribir nuevamente a los niños a una escuela.
ResponderEliminarLastimosamente para los más pequeños es un problema el que abandonen la escuela ya que se hace una pausa en su desarrollo integral y muchas veces el regresar a la escuela se hace solo una ilusión porque no siempre los niños regresan, ellos mientras van creciendo ven que el dinero ayuda más en casa que estar haciendo una tarea de horas, entonces la solución es dejar para siempre la escuela y saber solo lo básico, como sumar, restar, leer y escribir.